entorno
inmejorable
En medio de la Ruta del Císter, entre los monasterios de Poblet, Vallbona y Santes Creus, descubre los paisajes centenarios de la Conca de Barberà: sus viñedos y bodegas, los olivos ancestrales y los viejos molinos de aceite, las montañas de Prades o el Valle del Corb.
Un territorio virgen y singular para recorrer sin prisa y degustarlo, entre plato y plato, en cualquier pequeño rincón de las cocinas y masías de la comarca.